12 de abril
El 12 de abril de 1955 se conoció por primera vez la vacuna contra la poliomielitis, creada por Jonas Salk. Esta consiste en una dosis inyectada de poliovirus inactivados o muertos en tres variedades de referencia. Los virus se cultivaban en células Vero que provienen de tejido epitelial renal de mono y se inactivan posteriormente con formol.
La vacuna de Salk da inmunidad mediada por IgG en el torrente sanguíneo, por lo que previene el progreso de la infección por poliovirus a una viremia y protege a las neuronas motoras. Así, se elimina el riesgo de la polio bulbar y del síndrome pospolio. Aun así, al no haber protección a nivel de la mucosa del intestino, las personas que tienen la vacuna Salk pueden ser portadoras de la enfermedad y contagiar a individuos que no están vacunados, por ello, algunos países han prohibido su uso. Esta vacuna inactivada se administra mediante inyección intramuscular, al igual que los vacunas para otras enfermedades.
Tanto la vacuna de Salk, como la de Sabin, se ha logrado la erradicación de la poliomielitis en la mayor parte del mundo y se ha reducido la incidencia de la enfermedad.