El servicio de Farmacia del Hospital Ramón y Cajal, premiado por el Consejo General de Colegios Farmacéuticos

Por el proyecto “Farmacia Hospitalaria Verde” realizado conjuntamente con la Unidad de Gestión Ambiental del hospital

El Hospital Universitario Ramón y Cajal ha sido galardonado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos por el proyecto “Farmacia Hospitalaria Verde” en la categoría medioambiental de farmacéuticos de la tercera edición de los “Premios a la Innovación Social: Farmacéuticos y ODS” celebrados en la sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid. El proyecto galardonado consiste en un plan de mejora de la sostenibilidad del uso del medicamento que se lleva a cabo dentro del hospital.

Manuel Vélez, del Servicio de Farmacia del Hospital, ha sido el encargado de recoger el primer premio de manos de Antonio Blázquez, jefe del Departamento de Medicamentos de Uso Humano de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios. El acto, al que han asistido más de 300 personas, ha estado conducido por Antonella Broglia, experta en Innovación Social; y presidido por César Hernández, director general de Cartera Común de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia.

Gran impacto ambiental

El proyecto premiado ha sido diseñado, por una parte, por un grupo de farmacéuticos del Servicio de Farmacia (Carmen Palomar Fernández, Covadonga Pérez Menéndez- Conde y Manuel Vélez Díaz-Pallarés) y liderado por la jefa de dicho servicio, Ana Álvarez Díaz, y, por otra parte, por Itziar Igartua Pascual, de la Unidad de Gestión Ambiental, cuyo responsable es el subdirector de Gestión y Servicios Generales, Manuel Cuerva. “Es un proyecto ambicioso, integral e interdisciplinar que abarca las diferentes etapas por las que transcurre un medicamento. Pero sobre todo incluye a las personas”, subraya Manuel Vélez.

“Farmacia Hospitalaria Verde” consta de diferentes estrategias para disminuir el impacto de los medicamentos como, por ejemplo, la de disminuir el proceso de reenvasado de fármacos gracias a una mejora en la selección de los mismos. “En el hospital –explica Vélez- se reenvasan más de medio millón de unidades al año y en tan sólo un año hemos logrado disminuir la cifra en un 9%, lo que supone más de 6 kilómetros de plástico de reenvasado y con un peso de 33kg”.

Otra acción ha sido agrupar a los pacientes con tratamientos de corta estabilidad y de alto impacto económico en el hospital de día médico. Así, se elaboran en un mismo día las mezclas individualizadas de cada paciente maximizando el aprovechamiento de viales. En el proyecto, añade, también se ha trabajado “en el registro de la evaluación de la peligrosidad de los medicamentos no citotóxicos” y se ha revisado “su potencial de bioacumulación, su toxicidad y su persistencia”. Este análisis, a su juicio, ha sido “crucial para poder segregar los residuos de manera más efectiva, alineándolos con su impacto ambiental” y permitiendo “adoptar prácticas más sostenibles en la gestión de desechos”.

Compromiso con los pacientes

Este proyecto también supone estar comprometidos con las acciones relacionadas con la desprescripción de fármacos de forma consensuada con los médicos del hospital, de forma que desde el hospital se pueda reducir la polimedicación eliminando medicamentos que puedan ser potencialmente inapropiados. Por último, otra iniciativa es el compromiso que “Farmacia Hospitalaria Verde” mantiene con los pacientes y el envío de medicamentos a domicilio a través de empresas verdes y con la selección de los productos de embalaje. “Hacemos más de 100 envíos diarios de forma que reducimos la huella de carbono”, añade Manuel Vélez.