El beneficio de cada euro invertido en el calendario nacional de vacunación en España asciende a entre 3 y 4,5 euros, según un estudio
Los resultados refuerzan a la vacunación como una medida preventiva eficiente, con un beneficio que compensa la inversión necesaria
La inmunización es una parte fundamental de los sistemas sanitarios del mundo, ya que previene enfermedades potencialmente mortales y contribuye a tener una vida más larga y saludable. Los calendarios de vacunación han permitido alcanzar altos índices de inmunización y reducir, así, la incidencia de numerosas enfermedades infecciosas, entre ellas la difteria, la poliomielitis y la rubeola.
Sin embargo, a pesar de que están ampliamente reconocidos, los beneficios de la vacunación son difícilmente medibles, en particular cuando se trata de analizar de manera global los calendarios nacionales de vacunación. Por ello, GSK ha promovido, de la mano de diversos expertos, la elaboración del estudio Cost-benefit analysis of the National Immunization Program in Spain, publicado recientemente en la revista Human Vaccines & Immunotherapeutics, con el fin de evaluar la relación coste-beneficio del calendario nacional de vacunación en nuestro país.
El análisis realizado midió la repercusión en términos sanitarios y económicos desde el punto de vista social, que implica vacunar a una cohorte de recién nacidos a lo largo de sus vidas, en comparación con la no vacunación. Para ello se han considerado dos escenarios: por un lado, el calendario de vacunación (CV) del año 2020 y, por otro, un CV ampliado, en el que se añadieron cuatro programas vacunales adicionales: rotavirus y meningococo B en la edad infantil, recuerdo de tosferina en mayores de 65 años y herpes zóster en mayores de 50 años, siendo este calendario ampliado bastante similar al que tenemos en 20243. Los resultados se presentan como una relación coste-beneficio, que muestra el beneficio económico por cada 1€ invertido en estos CV.
Aumento del beneficio
Las conclusiones de este estudio ponen de manifiesto que la inversión total para vacunar a esta cohorte a lo largo de su vida, según el calendario de 2020, ascendería a 168,5 millones de euros y a 275,5 millones de euros con el calendario ampliado, mientras que los potenciales beneficios serían de 772,2 y 803,0 millones de euros, respectivamente. Esto resulta, en términos comparativos, en un ratio de coste-beneficio social de 4,58€ para el CV de 2020 y de 2,91€ para el CV ampliado.
En concreto, el ratio asciende a 3,19€ en el caso de la vacunación infantil y a 1,49€ para la vacunación en adultos, según el CV ampliado. Así mismo, se ha calculado que el 54% del retorno corresponde a beneficios de índole social que trascienden la propia salud de los pacientes, evidenciando así la importancia de los programas de inmunización. Por otra parte, los análisis de sensibilidad indicaron que se obtendría un mejor resultado de retorno si se excluyesen las vacunas sin ratios publicados (a los que se imputa un coste, pero ningún beneficio, por ausencia de literatura) o si se considerasen precios de compra pública en lugar de precios notificados.
Proteger más a los mayores
Estos resultados destacan también el gran beneficio social que brinda la vacunación en niños. La diferencia de ratio coste-beneficio con respecto a la vacunación en adultos tiene su origen en que los calendarios de vacunación pediátrica están más desarrollados y, al tratarse de niños, pueden beneficiarse de los efectos de las vacunas administradas a lo largo de toda una vida. No obstante, también debe tenerse en cuenta que, según un reciente informe de la Office of Health Economics (OHE), si se tuviesen en cuenta los beneficios económicos que la vacunación del adulto puede traer a la sociedad de forma ampliada, se calcula un retorno de 19 euros por cada euro invertido en cuatro programas de vacunación del adulto.
Al margen de lo anterior, según la Dra. María Fernández Prada, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública del Hospital Vital Álvarez Buylla (Asturias), y una de las autoras de este estudio: «En España (país más longevo de la Unión Europea según el último informe de la oficina comunitaria estadística Eurostat) y en otros países de Europa, las autoridades sanitarias y las sociedades científicas están enfatizando cada vez más sobre la protección de las personas mayores, quienes tienen un mayor riesgo de enfermedades infecciosas debido a la disminución de su inmunidad con la edad y cuyas necesidades sanitarias son mayores en el caso de precisar asistencia médica en el domicilio o en el hospital».
«Una aproximación novedosa»
Por su parte, el Dr. Alberto Pérez, director médico del Hospital Nuestra Señora De Sonsoles (Ávila) y autor del estudio, comenta que: «Este estudio presenta una aproximación novedosa, que muestra cómo la vacunación a lo largo de la vida es una medida preventiva eficiente, con beneficios que compensan la inversión necesaria, y cuya eficiencia se mantiene con la inclusión de nuevas vacunas. Por ello, independientemente del impacto económico individual de cada estrategia vacunal, cuando se consideran en su conjunto dentro de un calendario nacional de vacunación se produce un retorno positivo de la inversión con beneficios sanitarios y económicos para la sociedad. Ahora somos capaces de poner cifras tanto a la inversión como al retorno económico que revierte a la sociedad la vacunación a lo largo de la vida».
Sobre el potencial impacto de los resultados de este estudio en nuestro país, la autora Natalia Casinello , especialista en economía financiera y contable de la Universidad Pontificia de Comillas, comenta que: «El estudio confirma el impacto positivo de los calendarios de vacunación, alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS 3- Salud y Bienestar) por lo tanto, pueden ser de utilidad para los gobiernos y en concreto para el Ministerio de Sanidad, de cara a la futura toma de decisiones, al servir como punto de reflexión sobre la potencial necesidad de incremento de recursos dedicados a los calendarios de vacunación y su implementación. De acuerdo con el artículo de Fernández Conde S. et al 2023 del Ministerio de Sanidad, actualmente los recursos dedicados a vacunas en España tan solo suponen un 0,5 % respecto del gasto sanitario total».