Depemokimab proporciona mejoras estadística y clínicamente significativas en pacientes con Rinosinusitis Crónica con Pólipos Nasales (RSCcPN)
Los ensayos fase III ANCHOR-1 y ANCHOR-2 muestran mejoras en la obstrucción y el tamaño de los pólipos nasales con la dosis semestral de depemokimab frente a placebo
GSK ha anunciado los resultados completos de los ensayos clínicos positivos fase III ANCHOR-1 y ANCHOR-2, que evalúan el perfil de eficacia y seguridad de depemokimab frente a placebo (ambos con tratamiento estándar en adultos con Rinosinusitis Crónica con Pólipos Nasales (RSCcPN). Depemokimab es un anticuerpo monoclonal de acción ultraprolongada en fase de investigación dirigido contra la interleucina-5 (IL-5), una citoquina (proteína) clave en la inflamación respiratoria tipo 2 que se presenta en hasta el 85% de las personas con RSC-NP. Los resultados de estos ensayos se han presentado en una sesión de resumen oral de última hora en el reciente congreso conjunto de la AAAAI/WAO, celebrado en San Diego (Estados Unidos), y se han publicado de forma simultánea en la revista científica The Lancet.
Los ensayos ANCHOR-1 y ANCHOR-2 cumplieron las variables co-primarias de eficacia, pues la administración semestral mostró mejoras estadística y clínicamente significativas en relación al tamaño de los pólipos nasales y obstrucción nasal, dos de las medidas clínicas de gravedad de la enfermedad, en comparación con placebo. Adicionalmente, el análisis conjunto de ambos ensayos mostró mejoras (reducciones) respecto al valor basal frente a placebo en base a la puntuación de los pólipos nasales a las 52 semanas y las puntuaciones medias de obstrucción nasal durante las semanas 49-52.
Para ANCHOR-1 y ANCHOR-2 fue reclutada una amplia muestra de pacientes con una gravedad de síntomas heterogénea, reflejo de la práctica clínica en el mundo real. Los beneficios del tratamiento se observaron en la primera evaluación y se mantuvieron hasta la semana 52.
Depemokimab: una opción terapéutica innovadora
Kaivan Khavandi, vicepresidente sénior y director global del área de Respiratorio/Inmunología I+D de GSK, ha afirmado: «Los datos actuales se basan en el conjunto de evidencias que respaldan el uso de depemokimab de acción ultraprolongada y demuestran reducciones significativas de los pólipos nasales con un régimen de dosificación semestral. Dado que casi el 40% de los pacientes necesita repetir la intervención quirúrgica y muchos requieren corticosteroides sistémicos a largo plazo, existe una clara necesidad médica no cubierta de alternativas terapéuticas que ayuden a aliviar la carga debilitante a largo plazo de esta enfermedad».
Por su parte, el Dr. Joaquim Mullol, director de la Unidad de Rinología & Clínica Olfato, del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Clínic Barcelona, Universitat de Barcelona, FRCB-IDIBAPS y CIBERES, y uno de los investigadores principales del estudio ANCHOR, ha añadido: «La rinosinusitis crónica con pólipos nasales (RSCcPN) es una enfermedad inflamatoria que tiene un alto impacto en la calidad de vida de los pacientes debido a sus síntomas, donde destaca la pérdida del olfato, que acarrea».
Y continúa: «Para los especialistas, será clave poder disponer de esta nueva opción terapéutica para ofrecer a los pacientes que viven con esta enfermedad. Gracias a su mecanismo de acción prolongada, permitirá un control de la inflamación de forma sostenida con un régimen de dosificación más conveniente para los pacientes, con dos administraciones al año. Sin duda, los resultados de eficacia y seguridad, consistentes en los objetivados en otras indicaciones como el asma, comorbilidad altamente frecuente en la RSCcPN, contribuirán a una mejora en el control de los síntomas evitando recurrir a la cirugía y al uso de corticoides sistémicos así como a mejorar la calidad de vida de estos pacientes».
Resultados clínicos y eficacia de depemokimab
En un análisis conjunto de los criterios de valoración secundarios de ambos estudios, se observaron mejoras estadísticamente significativas a favor de depemokimab frente a placebo. Entre ellas se incluyen los cambios desde el inicio en la puntuación VRS de rinorrea, la puntuación VRS de pérdida de olfato, además de la puntuación CT de Lund-Mackay, una evaluación por imagen de los senos paranasales, y del SNOT-22, una medida de la calidad de vida relacionada con la enfermedad.
En la semana 52, los resultados de los estudios ANCHOR agrupados el 74% de los pacientes del grupo de depemokimab y el 64% de los pacientes del grupo de placebo no necesitaron intervención quirúrgica, CS ni medicación moduladora de la enfermedad durante las 52 semanas del estudio.
Cuando se evaluó la intervención con cirugía o medicación moduladora solo, los resultados siguieron mostrando una tendencia favorable a depemokimab: el 88% de los pacientes tratados con depemokimab no se sometieron a cirugía ni recibieron medicación moduladora de la enfermedad, frente al 83% del grupo placebo.
La proporción de pacientes que presentaron acontecimientos adversos fue similar entre los grupos de tratamiento y placebo en ANCHOR-1 (74% frente a 79%) y ANCHOR-2 (76% frente a 80%). Estos resultados respaldan los obtenidos con SWIFT-1 y SWIFT-2, ensayos fase III con depemokimab en pacientes con asma con inflamación respiratoria tipo 2. Adicionalmente, <1% de los pacientes con el tratamiento y el 1% del grupo placebo en ANCHOR-1 y 2, discontinuaron el tratamiento o abandonaron el estudio debido a los acontecimientos adversos. Los investigadores no consideraron que hubiera ningún acontecimiento adverso grave relacionado con el tratamiento del estudio.
Desafíos y avances en la RSCcPN
La RSCcPN es una enfermedad crónica que afecta hasta al 4% de la población general. El tratamiento estándar actual, que incluye cirugía y el uso de corticoides sistémicos, no es óptimo para abordar el impacto a largo plazo de la enfermedad, y casi la mitad de los pacientes viven con síntomas mal controlados. A pesar de que los CS a corto plazo mejoran temporalmente los síntomas, se sabe que su uso repetido provoca efectos adversos graves, como un mayor riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares, cataratas o osteoporosis. La cirugía también mejora los síntomas, pero hasta en un 40% de los pacientes experimenta una recurrencia de la RSCcPN y de los síntomas en un plazo de 18 meses debido a que la inflamación subyacente que provoca la enfermedad sigue presente y no ha sido suficientemente controlada por la cirugía.
Las conclusiones de ANCHOR-1 y -2, junto con los datos de los ensayos SWIFT-1 y SWIFT-2, se están usando para respaldar las solicitudes de autorización en distintos países en todo el mundo, tanto para el asma con inflamación respiratoria tipo 2 como para la Rinosinusitis Crónica con Pólipos Nasales. Actualmente, el fármaco no está aprobado en ningún país para ninguna de estas indicaciones.