ONG Stop
Stop es una ONG pionera en España, siendo una de las primeras en representar la lucha contra el VIH en la historia de nuestro país
ONG Stop nació en 1986 en Barcelona como asociación comunitaria de base bajo el nombre Gais per la Salut para dar una respuesta rápida y propia al impacto del VIH antes de que llegaran políticas públicas específicas. Con el tiempo, su razón de ser se amplió desde la prevención a la defensa de los derechos sexuales, siempre desde y para la comunidad LGTB+ y las personas trans que ejercen trabajo sexual. Ese origen explica su ADN: intervención de proximidad, liderazgo comunitario y una lectura de la salud sexual que incorpora bienestar, autonomía y ausencia de estigma.
ONG Stop, una historia de referencia
Su historia muestra una evolución pionera en su ámbito. A finales de los ochenta impulsó los primeros talleres de sexo más seguro dirigidos a hombres gais; en 1995 abrió un servicio comunitario de prueba del VIH; en 2006 llevó la prevención a Internet; y en 2015 creó ChemSex Support, un dispositivo de reducción de riesgos asociado al consumo en contextos sexuales, que se convirtió en referencia dentro y fuera de Cataluña. La entidad ha sabido incorporar los avances biomédicos y los ha traducido en campañas pedagógicas, como la divulgación de la PrEP o del mensaje «Indetectable = Intransmisible», sin renunciar a un enfoque centrado en las personas y sus contextos reales.
Hoy su actividad combina atención directa, educación entre iguales e incidencia. En el plano asistencial ofrece prueba rápida de VIH y sífilis, asesoramiento confidencial, acompañamiento a recursos sanitarios y soporte individual para personas LGTB+ con VIH. Atiende necesidades sociales y jurídicas (empadronamiento, acceso a la tarjeta sanitaria, extranjería o procesos de transición) e impulsa la inserción laboral. Mantiene un equipo de cibereducadores que contesta consultas sobre salud sexual en canales digitales y un grupo de educadores de calle que actúa en espacios de encuentro gay de la ciudad. Integra, además, ProtegerSex, un programa liderado por hombres y mujeres trans que ejercen trabajo sexual, y sostiene espacios grupales y formativos para reforzar habilidades de autocuidado y decisión informada.
Zonas de alcance
El alcance territorial de Stop se ha ensanchado en los últimos años. Mantiene su sede histórica en Barcelona y dispone de atención presencial en Sevilla, donde el Ayuntamiento cedió un local para desarrollar cribado y prevención de VIH/ITS en zonas con menor cobertura, lo que ha permitido acercar los servicios a población especialmente vulnerable. También trabaja bajo cita en el resto del Estado y participa en iniciativas de cooperación en América Latina orientadas a información, formación y empoderamiento comunitario.
Su estructura interna responde a ese espíritu participativo. La asamblea general de socios elige una junta directiva de carácter voluntario, a la que se integran representantes de las comisiones de voluntariado. Un equipo técnico y la gerencia sostienen la operativa cotidiana y dan soporte a las decisiones de las comisiones. El organigrama, con la asamblea en la cúspide, la junta y el Equip Permanent como charnela, y las comisiones de talleres, educadores de calle, cibereducación, prueba rápida o ProtegerSex en la base, refleja un gobierno distribuido que acerca la decisión a quienes ejecutan la intervención. La documentación de transparencia identifica además a la presidencia y al resto de cargos, con Jean Sebastien Meyer como presidente en el mandato más reciente disponible.
¿Qué objetivos plantea la ONG?
Los objetivos operativos están alineados con una misión clara: promover los derechos sexuales y empoderar a las personas para el cuidado de su salud sexual. Para ello, Stop desarrolla recursos que reduzcan el impacto del VIH y de otras ITS, orienta sus servicios al consejo asistido y a la reducción de daños, reivindica el acceso universal al sistema sanitario y combate la desigualdad desde un enfoque libre de estigmas y prejuicios. La prevención, en este marco, no se limita a la información biomédica: incorpora emociones, placer, negociación del consentimiento y condiciones sociales que afectan a la toma de decisiones.
Esa filosofía se traduce en campañas sostenidas y actos públicos con identidad propia. En el Día Mundial del Sida ha lanzado propuestas como ¿Y la cura pa’ cuándo?, VIHnculos de intimidad, Indetectable = Intransmisible o Lo positivo de ser positivo, con mensajes que hablan de ciencia, pero también de autoestima, vínculos y estigma. En el calendario comunitario mantiene acciones de calle en el Orgullo, piezas gráficas de Sant Jordi, intervenciones en Navidad o la Castañada y campañas de visibilización del trabajo sexual masculino; además, ha trabajado contenidos específicos para grandes eventos como el Circuit Festival. La continuidad del archivo de campañas muestra una estrategia de comunicación sostenida, actualizada y muy pegada a la vida real de su base social.
Por un futuro mejor
Treinta y nueve años después de su fundación, Stop es una organización singular en el ecosistema español de la respuesta al VIH: una entidad que combina prueba y acompañamiento, formación y activismo, y que ha sabido reinterpretar la prevención sin moralismos, con lenguaje directo y recursos útiles. Su fortaleza reside en la gobernanza comunitaria, en la escucha a quienes viven con VIH y a quienes sostienen redes de cuidado en los márgenes, y en la capacidad de articular servicios, campañas y alianzas institucionales sin perder la voz propia que la ha caracterizado desde 1986.