Hospital Universitario de Torrejón
Hace poco más de una década, el Hospital Universitario de Torrejón de Ardoz abrió sus puertas con la promesa de llevar una atención sanitaria cercana, moderna y de calidad a los habitantes del Corredor del Henares. Hoy ese compromiso no sólo se ha cumplido, sino que se ha ampliado, se ha consolidado, y ha marcado un antes y un después en la asistencia médica de la zona.
Nacimiento y primer impulso
El Hospital Universitario de Torrejón comenzó a funcionar oficialmente en septiembre de 2011. Nació con la vocación de atender a los más de 140.000 residentes que viven en Torrejón de Ardoz y municipios vecinos como Ajalvir, Daganzo, Ribatejada y Fresno de Torote, extendiendo su área de influencia a todos los madrileños que opten por acudir. Su ubicación en Soto del Henares, en una parcela de más de 60.000 metros cuadrados, fue seleccionada pensando en la accesibilidad, en la capacidad de expansión y en la cercanía tanto para población urbana como para la semiurbana del Corredor.
Desde sus inicios, ya estaba claro que no sería un hospital más, ya que contaría con los servicios fundamentales médicos y quirúrgicos, urgencias modernas, una maternidad potente, atención especializada para niños, equipos diagnósticos avanzados y la incorporación progresiva de innovación asistencial.
Crecimiento de la actividad asistencial y datos que hablan por sí mismos
A lo largo de los años, Torrejón ha acumulado cifras que ilustran su impacto real en la salud de la población. En sus primeros diez años registró cientos de miles de consultas externas, decenas de miles de intervenciones quirúrgicas, más de veinte mil nacimientos, un gran número de pruebas radiológicas y una creciente actividad en urgencias, hospitalización, diálisis o sesiones de hospital de día.
Durante su décimo aniversario se destacaba que, sólo hasta ese momento, se habían realizado alrededor de ciento treinta mil intervenciones, casi cuatro millones de consultas y más de un millón de urgencias atendidas. También se registraron importantes cifras en sesiones de hospital de día y tratamiento dialítico, reflejando un hospital que ya no sólo responde a urgencias, sino que acompaña a pacientes con enfermedades crónicas, recuperaciones, tratamientos prolongados y demás tratamientos.
Especialidades destacadas
El Hospital Universitario de Torrejón ofrece una cartera de servicios muy amplia, con especial énfasis en atención materno-infantil, cirugía vascular, reumatología pediátrica, neonatología, urgencias pediátricas, cardiología, oftalmología, neurología y aparato digestivo, entre muchas otras.
Uno de los elementos que ha llamado la atención es el Programa de Parto Respetado que promueve un enfoque más individualizado en el embarazo, parto y puerperio, con salas de dilatación, paritorios que ofrecen mayor comodidad y respeto a los tiempos de cada mujer, y acompañamiento que busca dignificar y humanizar la experiencia de dar a luz. También se ha destacado por paritorios diseñados con instalaciones como bañeras de dilatación, pensados para acercarse lo posible a entornos menos medicalizados sin perder garantías de seguridad clínica.
Por otro lado, la nueva Unidad de Reumatología Pediátrica permite cubrir necesidades en la población infantil, reduciendo la fragmentación de atención, de modo que los menores con enfermedades reumáticas no tengan que desplazarse o esperar largos plazos para recibir diagnóstico y tratamiento.
Tecnología y sostenibilidad
El hospital ha incorporado desde sus primeros años proyectos de innovación y transformación digital. En su undécimo aniversario ya se hablaba de telemonitorización, de sistemas de inteligencia artificial para apoyo diagnóstico, de digitalización de procesos internos, con el objetivo de hacer más eficiente la atención, reducir tiempos y errores, y mejorar la experiencia del paciente.
Además, un indicador reciente de su compromiso con el medio ambiente y la sostenibilidad es la instalación de una planta solar fotovoltaica sobre su cubierta, con cientos de paneles que generan una cantidad significativa de energía renovable, lo que permite que una parte del consumo eléctrico del hospital provenga de fuentes limpias.
Por otro lado, desde sus comienzos, el Hospital Universitario de Torrejón ha querido diferenciarse no solo por la tecnología o el volumen de atención, sino por cómo se trata al paciente. Cuestiones como la limpieza, la amabilidad del personal, la claridad de la información médica, la reducción de esperas y la calidad de las instalaciones han sido evaluadas regularmente en encuestas de satisfacción, que muestran resultados entre el 90-95%.
Se ha trabajado también en humanizar las zonas críticas como urgencias o UCI, abrir horarios de visitas más flexibles, programas de acompañamiento emocional, y adaptar espacios para que la estancia, ya de por sí compleja, se viva con el mayor confort posible.
Integración comunitaria y compromiso local
El hospital no sólo atiende enfermedades, sino que participa en la vida de la ciudad. Iniciativas como “Camino de Cervantes”, un programa que promueve el ejercicio, la salud preventiva y el contacto con la naturaleza mediante rutas por municipios del Corredor del Henares han reunido a miles de personas, transformando al hospital también en promotora de bienestar comunitario.
Se han organizado actividades culturales, deportes adaptados, jornadas de puertas abiertas, actividades de salud pública como donaciones de sangre, campañas de vacunación, charlas de prevención. Todo ello contribuye a que el hospital sea percibido no sólo como un proveedor de servicios sanitarios, sino como un actor social fundamental.
Mirando hacia el futuro
A punto de cumplir quince años, el Hospital Universitario de Torrejón no se conforma. Se proyectan mejoras en infraestructuras, mayor desarrollo de especialidades, incorporación tecnológica creciente (diagnóstico precoz, tratamientos personalizados, inteligencia artificial), así como una mejora continua de la sostenibilidad energética y medioambiental.
Se espera asimismo seguir incrementando su rol como centro de referencia en maternidad, en atención pediátrica especializada, en cirugía avanzada y en la atención crónica. La estrategia incluye también reforzar la Atención Primaria de enlace, mejorar la coordinación con centros de especialidades periféricos, fortalecer la hospitalización domiciliaria, y continuar avanzando en la humanización de la atención, manteniendo cercanía, empatía y compromiso con el bienestar integral de pacientes y familias.