Estreno del documental ‘Paseos con Ciencia’, que aborda los retos clínicos y sociales del envejecimiento de las personas con VIH
‘Paseos con Ciencia: Hacerse mayor con VIH’ es el cuarto capítulo de una serie de documentales científicos divulgativos sobre temas de interés en salud pública
La iniciativa ‘Paseos con Ciencia’, una serie de documentales científicos que abordan temas de interés relativos a la salud pública, se estrena al gran público con la emisión de su cuarto capítulo, “Paseos con Ciencia: Hacerse mayor con VIH”, con el objetivo de profundizar en los retos clínicos y sociales del envejecimiento de las personas con VIH.
Este proyecto de divulgación científica está dirigido por Carlos Martínez (Anchoa Films) y Débora Álvarez (La Doctora Álvarez) y cuenta con el mecenazgo científico de MSD y el apoyo de la Asociación de la Red de Investigación en Sida.
El objetivo de esta iniciativa es generar una reflexión que impulse el cambio social a través del desarrollo de políticas públicas. En palabras de la codirectora de la serie documental, Débora Álvarez, se trata de un formato adecuado para acercar esa evidencia científica “de manera que se pueda profundizar en la relevancia de estos temas e incluirlos en la agenda política”. La codirectora incide en la importancia de hablar del VIH para derribar tabúes y acabar con los prejuicios asociados al virus. “Las personas que han vivido muchos años con la infección, los llamados “supervivientes”, son personas que se han enfrentado a muchísimas dificultades a lo largo de sus vidas, clínicas, pero también emocionales, como las pérdidas de personas cercanas a causa del sida, especialmente en los inicios de la epidemia en los años ochenta y noventa”, destaca.
En este sentido, Manuel Cotarelo, director de Medical Affairs de Enfermedades Infecciosas de MSD en España, destaca la amplia trayectoria de la Compañía en el descubrimiento y desarrollo de nuevos fármacos para tratar de mejorar la salud y la calidad de vida de estos pacientes. “En MSD estamos ampliando los límites de la ciencia para hacer frente al VIH porque aún quedan necesidades médicas no cubiertas. La erradicación del virus es nuestra meta final y, por ello, apostamos por un compromiso firme con el cuidado y abordaje integral de estos pacientes con VIH”, remarca.
El Dr. Santiago Moreno, jefe de Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal, explica que “el año pasado se diagnosticó de VIH a casi 3.000 personas. Esta cifra nos muestra la importancia de seguir trabajando en su prevención. Además, es importante insistir en la necesidad de hacerse la prueba también en edades adultas; por ejemplo, entre las personas mayores de 50 años: dos de cada tres se diagnostican tarde”.
A pesar de ello, la situación actual del VIH en España, en general, es buena. Así lo indica el jefe de la Unidad de Inmunopatogenia del Sida del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), el Dr. Pepe Alcamí: “Es buena porque a los pacientes se les realiza el seguimiento en unidades especializadas con un tratamiento antirretroviral muy eficaz: la esperanza y calidad de vida de estos pacientes se iguala a la de una persona que no vive con el VIH”, detalla. No obstante, existen una serie de aspectos con margen de mejora, como el diagnóstico tardío de la enfermedad. “Los pacientes son diagnosticados cuando ya llevan mucho tiempo con el VIH o más de la mitad tienen cifras de linfocitos bajas y eso nos sugiere que llevan viviendo con VIH sin saberlo durante varios años”, subraya el Dr. Alcamí.
El reto de hacerse mayor con VIH
El reto terapéutico de los pacientes con VIH es lidiar con todos los problemas de salud ligados al proceso de envejecimiento. El documental, “Paseos con Ciencia: Hacerse mayor con VIH”, ofrece una visión amplia de los retos y las preguntas sin responder a las que se enfrentan las personas que se están haciendo mayores con el virus. Como señala Débora Álvarez, “el proceso de envejecimiento es un reto en sí mismo, y en el caso de las personas con VIH la magnitud de este reto se ve multiplicada por todo lo que se añade al vivir con el virus: el envejecimiento acelerado y acentuado, las comorbilidades, la acumulación de los estigmas, la soledad no deseada, etc.”.
De acuerdo con el Dr. Alcamí, el desarrollo de comorbilidades y otras enfermedades asociadas con la edad se ve acelerado en pacientes con este virus. Según explica, “si bien aún no entendemos completamente estos mecanismos, podemos decir que los pacientes que viven con el virus tienen mayor probabilidad de desarrollar cáncer o una enfermedad cardiovascular a una edad un poco más temprana”. La comorbilidad más importante sería la enfermedad cardiovascular. Por otro lado, resalta la importancia de una atención integral en este grupo de pacientes. Tal y como explica, “la atención integral implicar cuidar su bienestar, que consigan hacer una vida más sana, con menor estrés laboral y social, de manera que abandonemos el concepto de atención limitada solo a los fármacos. Se trata de un desafío a nivel global donde también deberían estar incluidas las personas con VIH”.
Así lo corrobora el Dr. Santiago Moreno, quien afirma que “llevamos 40 años atendiendo a personas con VIH en nuestras consultas, y muchas de ellas se están haciendo mayores. Esto representa un nuevo reto para el sistema sanitario, que debe ofrecer una atención multidisciplinar y centrada en el paciente para poder responder a todas las necesidades de las personas mayores con VIH”.
En el campo de la investigación, existen dos grandes desafíos pendientes. Tal y como apunta el jefe de la Unidad de Inmunopatogenia del Sida, uno de ellos es el desarrollo de una vacuna preventiva y el otro es la curación, es decir, que los pacientes puedan dejar de tomar el tratamiento antirretroviral. A corto plazo, según asegura el Dr. Alcamí, se esperan cambios en las pautas de tratamiento. “Tomar pastillas una vez a la semana probablemente llegue pronto”, concluye.