El contacto con perros y gatos ayuda a sobrellevar el dolor en pacientes crónicos
Asimismo, interactuar con un perro o con un gato ayuda a relajarse, un mecanismo muy eficaz para luchar contra el dolor crónico
Con motivo del Día Mundial del Dolor, que se celebra el 17 de octubre, la Fundación Affinity destaca que los perros y los gatos pueden ser un buen aliado para los pacientes con dolores crónicos. En concreto, la presencia de estos animales ayuda a sobrellevar el dolor a la vez que beneficia el bienestar psicológico de los enfermos.
En situaciones de enfermedad crónica, los animales de compañía mejoran las habilidades de afrontamiento frente al dolor y pueden aumentar la autoeficacia, es decir, la percepción del paciente de que puede manejar su dolor y sus consecuencias de forma eficiente, aunque no pueda eliminarlo. Esta conclusión forma parte de la revisión sistemática llevada a cabo por la Cátedra Fundación Affinity Animales y Salud de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), que se presentó el pasado mes de junio en Hamburgo en el congreso internacional Canine Science Forum 2025, y que destaca que los animales de compañía ayudan a las personas a superar momentos de dificultad.
En esta misma línea, el estudio The role of pets in supporting cognitive-behavioral chronic pain self-management: Perspectives of older adults de la Universidad Humboldt de Berlín, destaca que cuidar de un animal genera sentimientos de utilidad y facilita la expresión de conductas que son emocionalmente positivas para la persona. Además, la convivencia con un animal de compañía promueve un estilo de vida más activo- un factor muy importante en el manejo del dolor crónico- y facilita la interacción del paciente con su entorno.
Perros y gatos que alivian
Por otro lado, el intenso vínculo afectivo que se establece entre el paciente y el animal refuerza la sensación de apoyo incondicional, ayudando a afrontar el malestar físico y emocional de forma más eficaz. «El dolor no es solo un problema físico, sino una experiencia compleja en la que influyen de forma importante nuestras emociones y pensamientos. Por ello, la convivencia con un animal puede ayudar a las personas a sobrellevarlo mejor. La interacción con él favorece la relajación, la distracción, la actividad física y el contacto social, lo que fortalece la capacidad de las personas para convivir con el dolor de una manera más llevadera», destaca el Dr. Jaume Fatjó, director de la Cátedra Fundación Affinity Animales y Salud de la Universidad Autónoma de Barcelona.
El estudio concluye, además, que la relajación es un mecanismo muy eficaz para luchar contra el dolor crónico, pues ayuda al paciente a desviar el foco atencional del dolor. En este sentido, destaca la presencia incondicional del animal de compañía y el apoyo de este cuando el paciente necesita relajarse y distraerse.