El Hospital Universitario Infanta Elena abrió sus puertas en diciembre de 2007, siendo inaugurado oficialmente el 24 de noviembre por la Infanta Elena junto a representantes políticos de los municipios a los que atiende

El Hospital Universitario Infanta Elena, concebido como un centro de titularidad pública bajo gestión directa del Servicio Madrileño de Salud, aunque operado por Quirón Salud, nació con el objetivo claro de ofrecer una asistencia sanitaria de alta calidad, cercana y eficiente a los habitantes de Valdemoro, Ciempozuelos, Titulcia y San Martín de la Vega.

Infraestructuras del Hospital Infanta Elena

Diseñado sobre una zona estratégica en Valdemoro, el hospital cuenta con 260 habitaciones individuales, diez quirófanos, urgencias tanto generales como pediátricas, una pequeña unidad de maternidad, unidad neonatal y una UCI reconocida por su buen trato. Así mismo, las instalaciones incorporan tecnología avanzada como TAC, resonancia, ecografía y un moderno banco de sangre, todo ello pensado tanto para cuidar de la salud como para proporcionar comodidad y privacidad a los pacientes.

Por otro lado, desde muy temprano, el Infanta Elena asumió la docencia como pilar fundamental. En 2010 obtuvo la acreditación para formar especialistas MIR y, solo un año más tarde, se transformó oficialmente en hospital universitario. Actualmente, imparte formación en once especialidades médicas, incluyendo Cirugía, Pediatría, Medicina Interna, Ginecología y Urología, y mantiene convenios tanto con la Universidad Francisco de Vitoria como con otros centros docentes, ofreciendo prácticas a grado y residencias.

Innovación asistencial y apuesta por la tecnología 3D y robótica

Entre sus logros tecnológicos más recientes se puede destacar la incorporación en 2022 de la plataforma PlasmaJet para cirugía oncológica, especialmente en tumores digestivos avanzados. Esta técnica minimiza el daño a los tejidos sanos y reduce las tasas de recaída. Igualmente, a comienzos de 2025 implantó un sistema robótico Da Vinci X, que ya ha permitido decenas de intervenciones en cirugía digestiva, urología, ginecología y cirugía torácica. Además, desde 2021 funciona una unidad de planificación quirúrgica 3D, con más de 600 reconstrucciones realizadas hasta 2024, ayudando en la preparación de operaciones complejas.

Por otro lado, la Unidad de Cuidados Intensivos del Infanta Elena logró un hito peculiar: se convirtió en la primera UCI del mundo en recibir una certificación internacional de “Buenas Prácticas de Humanización”. Este premio reconoce un enfoque centrado en el paciente, con iniciativas como diarios escritos por el equipo sanitario y acompañamiento emocional, así como apoyo a las familias. Este logro refleja el compromiso de profesionales y dirección por una medicina cálida y respetuosa aún en los momentos más críticos.

Además, el hospital participa en el programa E‑Res Salud, una iniciativa de evaluación de resultados que lleva en marcha desde 2019. Esta plataforma analiza indicadores como satisfacción del usuario, reducción de visitas a urgencias no programadas, ingresos evitables y mejoras en supervivencia. La integración de más de 48.000 pacientes y la gestión de casi 8.000 alertas en tiempo real demuestran que este modelo promueve una asistencia más eficaz y centrada en el bienestar.

Creación de una Unidad de Neuropediatría

Por otro lado, la reciente creación de una Unidad de Neuropediatría subraya el objetivo de ofrecer atención avanzada a la infancia. El servicio aborda trastornos como epilepsia, TDAH, neuropatías y enfermedades neurometabólicas, a través de consultas monográficas muy especializadas. Esta incorporación mejora la capacidad diagnóstica y el manejo de patologías complejas, con equipos de médicos dedicados a cada área.

En 2023 el Infanta Elena fue reconocido con la acreditación IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento), en fase 3D, por su apoyo decidido a la lactancia materna. El centro ofrece formación continua a profesionales, planes de parto personalizados y visita previa al paritorio, promoviendo un nacimiento más respetado y familiar.

Por ello, en menos de dos décadas, el Hospital Universitario Infanta Elena ha logrado consolidarse como un referente asistencial en el sur de Madrid. Su gestión mixta no ha frenado su crecimiento; todo lo contrario, le ha permitido potenciar su vocación docente, tecnológica y humana. Hoy cuenta con una inquietud permanente por ampliar especialidades, mejorar los resultados en salud y mantener un buen trato a los pacientes y sus familias.