Hospital Virgen de la Luz
Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, más de seis décadas al servicio de la salud de su provincia
El Hospital Virgen de la Luz de Cuenca es un pilar clave del sistema sanitario de la provincia conquense, con una trayectoria que supera los sesenta años. Desde su inauguración en 1964 hasta la actualidad, el centro ha evolucionado de un hospital regional a un referente de atención especializada, docencia e innovación en Castilla-La Mancha. Con una población de referencia que abarca toda el área integrada de Cuenca, el hospital combina tradición y modernidad para dar respuesta a los retos de salud de su territorio.
El hospital abrió sus puertas en el año 1964 como residencia sanitaria bajo el nombre de Virgen de la Luz, dando servicio a la creciente demanda de atención hospitalaria en la provincia. Con el tiempo, el centro experimentó varias ampliaciones y reformas para adaptarse a los avances tecnológicos y al aumento de la población. Una de las ampliaciones más importantes tuvo lugar en 1985, que permitió duplicar los recursos materiales y humanos del hospital. Posteriormente, en los años noventa y primeros del siglo XXI, se inauguró un edificio administrativo y un centro policlínico anexo, mejoras que posibilitaron separar los laboratorios, admisión, urgencias y radiodiagnóstico en instalaciones más modernas.
Capacidad y cobertura asistencial
El Hospital Virgen de la Luz presta asistencia especializada a la totalidad del Área Sanitaria de Cuenca, que incluye una población de aproximadamente 160.000 personas. El centro está compuesto por varios edificios: el principal, donde se sitúan la hospitalización, urgencias y radiología; el edificio administrativo; el policlínico; y zonas de apoyo logístico. En cifras recientes, el hospital contaba con alrededor de 411 camas de hospitalización asignadas a especialidades como cardiología, cirugía general y aparato digestivo, endocrinología, hematología, medicina interna, nefrología, neumología, neurología, obstetricia y ginecología, oftalmología, otorrinolaringología, pediatría, salud mental, reumatología, traumatología, urología, así como una unidad de cuidados intensivos.
El hospital dispone también de consultas externas en un largo listado de especialidades, incluyendo alergología, anatomía patológica, anestesiología, dermatología, geriatría, medicina nuclear, neurofisiología, oncología, entre otras. Esta amplitud asistencial permite que los pacientes de la provincia accedan a una atención sanitaria avanzada sin necesidad de desplazarse a otras comunidades.
Especialidades, logros y reconocimiento
Una de las áreas en la que el hospital ha destacado es la cardiología intervencionista. Desde la puesta en marcha de la sala mixta de hemodinámica y radiología intervencionista en 2019, el hospital superó el 90% de los cateterismos programados en su área, evitando desplazamientos a otros centros para muchas familias conquenses. Esta unidad, utilizada también por angiología, cirugía vascular y radiología intervencionista, supone un avance importante en la capacidad diagnóstica y terapéutica del hospital.
En el ámbito de calidad y reputación, el hospital ha escalado posiciones en los rankings nacionales independientes de reputación sanitaria, situándose entre los primeros hospitales públicos de Castilla-La Mancha. Esto confirma el reconocimiento del trabajo del centro y de sus profesionales.
El Hospital Virgen de la Luz también ha destacado en iniciativas de urgencias e investigación. Por ejemplo, una comunicación del servicio de urgencias sobre factores de pronóstico en ancianos atendidos por infección fue seleccionada entre las mejores en un congreso nacional, lo que demuestra la capacidad investigadora y científica del centro.
Docencia, investigación y futuro cercano
Aunque originalmente el hospital no nació como centro universitario, en las últimas décadas ha desarrollado una clara vocación formativa e investigadora. Está integrado en programas de docencia para residentes y estudiantes de ciencias de la salud, y participa en estudios clínicos y publicaciones. La infraestructura también se ha adaptado con aulas de formación, laboratorios y servicios de apoyo técnico.
Asimismo, el hospital está en fase de transición hacia un nuevo marco hospitalario, con la construcción del nuevo hospital universitario de Cuenca que asumirá progresivamente los servicios del Virgen de la Luz. En ese contexto, el centro histórico sigue funcionando con normalidad, y los profesionales han realizado visitas al nuevo edificio como parte de la planificación del traslado.
Retos y compromiso hacia la comunidad
El Hospital Virgen de la Luz afronta los retos tradicionales de cualquier hospital regional, es decir, adaptar sus servicios al envejecimiento poblacional, a la cronicidad, y al incremento de la tecnología médica. Además, debe coordinarse con la futura integración en el nuevo complejo hospitalario para asegurar una transición ordenada, sin pérdida de atención, y con el personal suficiente para el nuevo centro.
El compromiso del hospital con la comunidad conquense es sólido, puesto que ha celebrado su 60º aniversario con actos que involucraron a profesionales, pacientes, familias y ciudadanía en general, evidenciando su papel no solo como centro sanitario, sino como institución social y de referencia regional.
El Hospital Virgen de la Luz de Cuenca representa más de seis décadas de servicio, transformación y adaptación continua al servicio de la salud de la provincia. Su historia es la de un centro que ha evolucionado de hospicio regional a hospital moderno, con especialidades avanzadas, compromiso docente, investigación y atención centrada en el paciente. Ya con la mirada puesta en el futuro y en la integración del nuevo hospital universitario, el Virgen de la Luz sigue siendo un símbolo de salud, excelencia y proximidad para los conquenses.

