En Castilla y León las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de defunción en mujeres, representando el 28% de las defunciones en este grupo de población

Cardioalianza, la entidad estatal de pacientes cardiovasculares, presentó ayer en las Cortes de Castilla y León el  informe Las enfermedades cardiovasculares en Castilla y León: Propuestas de prioridades para la mejora de la prevención y la atención sanitaria. El acto contó con la participación de Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León en el acto de bienvenida, y con una mesa de debate con los miembros del Comité Científico del informe y otra mesa con los portavoces sanitarios de los principales grupos parlamentarios.

Desde la Junta de Castilla y León y la Consejería de Sanidad se han implementado diversas iniciativas en relación con las enfermedades cardiovasculares y se está promocionando la implementación de la Estrategia en Salud Cardiovascular del Sistema Nacional de Salud (ESCAV).

En España, las enfermedades cardiovasculares son una de las principales causas más frecuentes de mortalidad, representando el 26,5% del total de defunciones. En el caso concreto de Castilla y León, las enfermedades cardiovasculares fueron la primera causa de defunción en mujeres, siendo las responsables del 28% de las defunciones en este grupo de población, mientras que entre los hombres ocuparon la segunda posición por detrás de los tumores, representando el 23% de las muertes.

De acuerdo con datos correspondientes al año 2022 recogidos en la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE), la obesidad y el sobrepeso son los factores de riesgo más significativos de enfermedad cardiovascular en Castilla y León, ya que el 48,3% de la población presenta exceso de peso. Asimismo, y en relación con otros de los principales factores de riesgo cardiovascular, el 21,6% de los ciudadanos castellanoleoneses tienen hipertensión arterial, el 21% hipercolesterolemia, el 18,2% fuman y el 10% padece diabetes tipo 2.

La importancia de una estrategia común

Por ello, el documento de Cardioalianza pretende fomentar la comunicación y el diálogo entre todos los agentes involucrados, con el fin de promover la mejora de los resultados en salud de los pacientes con enfermedad cardiovascular mediante la optimización del proceso asistencial en Castilla y León. Así, se considera de gran interés implementar directrices claras y estandarizadas que garanticen una atención equitativa y accesible en todo el territorio abordando las desigualdades sociales y de género, y asegurando que todos los pacientes, independientemente de su situación geográfica, socioeconómica o sexo, puedan acceder a los recursos y tratamientos adecuados.

«Necesitamos una estrategia común, con directrices claras y un presupuesto asignado, que nos permita ser atendidos de manera efectiva y coordinada. La implementación de un plan regional sería clave para mejorar la prevención y atención de las ECV, reduciendo la heterogeneidad y favoreciendo la equidad asistencial», afirma Tomás Fajardo, presidente de Cardioalianza.

Desde la Dirección General de Asistencia Sanitaria y Humanización de la Gerencia Regional de Salud, Silvia Fernández señala: «En Castilla y León se ha actualizado la Cartera de Servicios de Atención Primaria en la que se describen las actividades de prevención y de promoción de la salud vascular individual, familiar y comunitaria, así como la atención a los problemas de salud vascular más prevalentes (atención a la persona fumadora, bebedora, obesa, con insuficiencia cardiaca, diabetes mellitus, dislipemia, enfermedad renal crónica, etc.)».

Seguimiento a lo largo de la vida

En la Cartera de Servicios de Atención Primaria de Castilla y León (2019) se propone una atención de la persona a lo largo de toda la vida que comienza con la promoción de hábitos de vida saludables desde el nacimiento hasta la vejez como queda reflejado en los servicios de actividades preventivas y promoción de la salud en el embarazo, la infancia, adolescencia, juventud, adulto, persona mayor, así como en el servicio de educación para la salud en centros educativos donde, desde Atención Primaria, los profesionales sanitarios acuden a los centros escolares y realizan talleres y sesiones promocionando los hábitos de vida saludables, en concreto y especialmente los relacionados con la salud cardiovascular. Asimismo, están incluidas en la Cartera de Servicios las actividades de prevención y detección precoz de los factores de riesgo cardiovascular según el tramo de edad de la persona.

Asimismo, Silvia Fernández señala: «También se ha actualizado la cartera de servicios de Atención Hospitalaria, destacando la implantación del Centro Servicio y Unidad de Referencia del sistema Nacional de Salud en Cardiopatías Familiares, distintas Unidades de referencia regional en patología cardiaca (Dispositivos de Asistencia Ventricular de larga duración, Hemodinámica y Electrofisiología Avanzada, Trasplante Cardiaco, etc.) junto al Código Infarto, el Código Shock Cardiogénico y los programas de Rehabilitación Cardiaca».

Atención más personalizada

Además de todos estos proyectos que permiten asegurar la atención homogénea y de calidad en toda Castilla y León, es preciso establecer y monitorizar indicadores específicos de resultados en salud cardiovascular que evalúen el impacto real de las intervenciones. Por estos motivos, los proyectos relacionados con la implementación de la Inteligencia Artificial y el Big Data en los sistemas de información de salud de Castilla y León, como herramientas para analizar datos de salud y controlar parámetros del paciente, facilitan una atención más personalizada, precisa y segura y permiten rediseñar planes de mejora y aumentar la calidad de vida de los pacientes.

Del mismo modo, en el informe se pone en valor el papel de los profesionales de enfermería, en concreto de los especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria, para para llevar a cabo la educación para la salud, el seguimiento de la cronicidad y la gestión de la continuidad asistencial. También es de interés trabajar en la mejora de las competencias de los profesionales sanitarios para potenciar la prevención, la detección precoz y la atención de las personas con enfermedades cardiovasculares. El trabajo colaborativo de los equipos interdisciplinares permite garantizar una atención especializada y de alta calidad en todos los niveles asistenciales.

Promoción de la salud, prevención, continuidad asistencial y rehabilitación cardiaca

Por otra parte, las autoridades autonómicas tienen como línea de trabajo transversal en sus proyectos impulsar la promoción de la salud, así como llevar a cabo el servicio de cartera de Atención Primaria de abordaje grupal y comunitario que está permitiendo crear un mapa de recursos comunitarios y fortaleciendo las relaciones entre los diferentes servicios y los agentes comunitarios. Asimismo, en el apartado del Aula de Pacientes del portal de salud de Castilla y León existe material adaptado a las personas según el tramo de edad para fomentar los hábitos de vida saludables y proporcionar el conocimiento y el autocuidado de la salud cardiovascular, así como los programas de rehabilitación.

En 2025 se va a impulsar y favorecer la capacitación de los profesionales sanitarios en Reanimación Cardiopulmonar Avanzada con el fin de realizar actividades comunitarias que permitan iniciar precozmente la cadena de supervivencia ante una parada cardiorrespiratoria (PCR) por parte de los primeros intervinientes y disminuir en lo posible el daño neurológico de las personas que sufren una PCR.

Respecto a la continuidad asistencial, los expertos recomiendan seguir contando con protocolos estandarizados para la atención y seguimiento de todas las enfermedades de índole cardiovascular, consensuados en equipos multidisciplinares y con la participación activa del paciente. El trabajo que se está realizando con el sistema de laboratorio unificado permite establecer la medición y el seguimiento uniforme de marcadores clave. Asimismo, se están optimizando los informes de cuidados al alta hospitalaria, así como la tele atención sanitaria.

En cuanto a la rehabilitación cardiaca el informe recoge la necesidad de ampliar y diversificar la red de programas de rehabilitación cardiaca y acelerar el trabajo que está desarrollando la Consejería para instaurar equipos multidisciplinares y crear protocolos mixtos de rehabilitación cardiaca con agentes comunitarios y atención primaria para pacientes de bajo riesgo.