Con esta apuesta, la compañía se mantiene a la vanguardia en el desarrollo de productos y servicios innovadores, fundamental para anticiparse y adaptarse a las demandas del cliente y reafirmarse como líder de mercado

La compañía PRIM apuesta por la innovación, escuchando de manera activa a los profesionales de la salud para identificar sus necesidades y las de sus pacientes, con el objetivo de tener un impacto positivo en la salud de estos. Una de las claves es poner en el centro a pacientes y profesionales y tratar de innovar para mejorar la calidad de vida de los pacientes, priorizando su salud y comodidad. La innovación está muy presente desde los inicios de la compañía, con más de 20 patentes a lo largo de su historia, siendo la primera en 1888: un dispositivo para suplir las extremidades humanas. Actualmente se desarrollan más de diez proyectos anuales.

«Trabajamos con expertos que están mano a mano con nuestro equipo de innovación aportando valor tanto en el proceso de desarrollo como en el proceso de validación de los productos», asegura Arantxa Comajuan, directora de innovación de PRIM. Además, la empresa apuesta por la innovación a nivel de sistemas productivos que permiten ofrecer al mercado productos innovadores, como por ejemplo el uso de la tecnología Bonding. Un sistema productivo que históricamente ha sido utilizado para la fabricación de productos relacionados con el mundo de la ropa técnica y el deporte como por ejemplo el ciclismo y el buceo, y que, aplicado a nuestro sector, ha permitido lanzar al mercado gamas de órtesis sin costuras, al eliminar los puntos de fricción que suelen causar irritaciones o incomodidad. Esto permite un ajuste uniforme y más suave al contacto con la piel y reduce los residuos generados durante la producción.

Cirugía cardiovascular adaptada a las pacientes

Por poner dos ejemplos, desde PRIM se ha desarrollado un chaleco torácico para solucionar un problema que se encuentran los cirujanos cuando realizan una operación en la que tienen que abrir el esternón a mujeres: en estos casos, por cuestiones anatómicas, la compresión torácica no puede realizarse igual que en los varones. «Los profesionales del sector nos pusieron esta problemática encima de la mesa y vimos claramente que las distintas necesidades de hombres y mujeres a la hora de abordar la recuperación de una cirugía de estas características requería de productos diferenciados que se adaptasen a las diferencias anatómicas entre ambos sexos. Una vez realizado el análisis, vimos que había algún producto en el mercado que trataba de solucionar esta dificultad, pero con grandes oportunidades de mejora, sobre todo, pensando en el confort del paciente durante su uso», asegura Arantxa Comajuan. 

De este modo, se inició un proyecto con el asesoramiento con profesionales de gran experiencia en la cirugía cardiovascular con quien se han desarrollado dos nuevos modelos de chaleco torácicos de compresión continua, uno de ellos especialmente diseñado para mujeres, en el que el propio diseño salva la zona de las mamas y permite realizar una correcta compresión torácica respetando la anatomía femenina.

Solución a un problema de movilidad

Otro de los productos desarrollados a raíz de la escucha activa es el antiequino textil para corregir la posición del pie equino, un problema traumatológico que afecta a la morfología del pie. Se trata de un producto destinado a un tipo de pacientes que, en la mayoría de los casos sufren de hemiplejia y por tanto tienen reducida la movilidad de uno de los lados de su cuerpo, y suelen tener problemas que van más allá del hecho de caminar con el pie equino.

«Por este motivo, hablamos con profesionales de la salud en el ámbito de la fisioterapia y la rehabilitación y con pacientes para tratar de entender cuáles eran las necesidades reales tanto a nivel de usabilidad como a nivel de confort. Desde esta aproximación, se ha trabajado en un proyecto para desarrollar un producto que permitiera, por un lado, ofrecer al paciente el mayor confort y, por otro, que pudiera ofrecerle la mejor usabilidad», confirma Comajuan. En todo este proceso de escucha, desarrollo y chequeo de los prototipos por especialistas, surge la necesidad de crear una hebilla imantada especial, que ha sido patentada, y que permite al paciente colocarse la ortesis de una manera sencilla logrando una muy buena corrección del equinismo.

PRIM, comprometidos con mejorar los productos del mercado

«Desde PRIM se analizan constantemente procesos productivos de otros sectores que pudieran aportar a nuestro sector mejoras e innovaciones. Hay un caso muy concreto en el que trajimos una tecnología de fabricación del mundo del deporte, en concreto, de las prendas de ciclismo y buceo a nuestros productos de ortésica. Se trata de una tecnología de fabricación sin costuras, conocida como tecnología bonding, que permite realizar uniones entre tejidos sin la necesidad de utilizar hilo. Esto permite poder ofrecer al mercado ortesis mucho más confortables eliminando la posibilidad de que produzcan roces o molestias al paciente durante su uso provocados por las típicas costuras», puntualiza la directora de innovación.