2 de diciembre
Un día como hoy, el 2 de diciembre de 1982, en la Universidad de Utah (EE.UU.) el dentista Barney Clark se convirtió en la primera persona en recibir un corazón artificial permanente. Fue el primer y único hombre en recibir un corazón artificial, aunque falleció a los meses de dicha intervención, debido a un descenso brusco en el flujo de sangre que le suministraba el corazón. Clark padecía una insuficiencia cardiaca congestiva y desde hacía un mes permanecía ingresado en el hospital por su estado terminal.
La operación de Barney Clark fue un evento histórico en la medicina, ya que marcó la primera implantación de un corazón artificial permanente en un ser humano. La intervención duró siete horas, y estuvo dirigida a manos del cirujano William DeVries, quien le implantó el corazón artificial Jarvik-7. Este corazón artificial tenía una base de aluminio, con cuatro válvulas mecánicas, dos ventrículos flexibles de poliuretano y dos pequeños tubos desde el fondo del ventrículo hasta la pared del pecho del paciente.
La actividad de este dispositivo se realizaba mediante un compresor de aire, fuera del cuerpo del enfermo, de un tamaño grande, y con una fuente de energía, pero la vida del corazón artificial se veía limitada por las conexiones a dicha fuente, las cuales al parecer eran poco fiables y difíciles de desplazar. Clark logró sobrevivir 112 días; murió tras sufrir el fallo irreversible de varios órganos.