La Fundación Pequeño Deseo y los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid se suman a la celebración del niño hospitalizado con la instalación de dos «campanas del alta»

El Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha celebrado el Día del Niño Hospitalizado con la participación de todos los profesionales del hospital, la dirección del centro, y numerosas fundaciones y ONG que colaboran con el centro. En este día tan especial, en el acto central de las celebraciones, numerosos trabajadores han salido a la puerta del hospital Materno Infantil a las 12 horas para lanzar besos a sus pequeños pacientes y cantar y bailar para transmitirles el cariño del personal que les cuida a diario.

Al finalizar el acto se han lanzado globos biodegradables respetuosos con el medio ambiente para dar visibilidad a esta fecha tan señalada y desear que los niños ingresados en el Marañón puedan recuperarse lo antes posible. También se han repartido galletas realizadas por el personal de Cocina.

Sorpresas, sonrisas y solidaridad: un día inolvidable en Pediatría

Las sorpresas han sido las protagonistas de este día en el que los niños han recibido la visita de diferentes asociaciones y de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid que han acompañado a los pacientes ingresados y les han entregado también regalos.

También, el colegio del hospital ha elaborado pequeños detalles para conmemorar este día tan especial y todas las unidades de Pediatría se vuelcan con los niños y los familiares para hacer de hoy un día diferente y de celebración.

Gracias al Servicio de Cocina, los niños tendrán un menú especial y un postre muy divertido hoy a la hora de comer, con el que estrenan una vajilla diferente solo para ellos. «Con este detalle queremos contribuir a que los pequeños tengan una estancia más agradable y amigable. Esperamos que les agrade y que se coman toda la comida para encontrar los pececitos del fondo», explica Ana Cerrillo, subdirectora de Servicios Generales del Hospital Gregorio Marañón.

Campanas de esperanza para el Niño Hospitalizado

Además, el Hospital Gregorio Marañón y la Fundación Pequeño Deseo han instalado dos «campanas del alta» en las áreas de hospitalización de pediatría para que los niños las hagan sonar para celebrar el fin del tratamiento de los pacientes infantiles, ofreciendo esperanza e ilusión no solo al que se va a casa, sino también a los niños y las familias a las que todavía les queda tratamiento por delante.

En acto de inauguración en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón, pionero en celebrar el Día del Niño Hospitalizado, ha contado con la presencia de la presidenta de su Comité de Humanización, Nuria Mira, quien ha resaltado que emprender acciones de humanización son otra forma de cuidar a nuestros pacientes y sus familias, y tratar de que su estancia en el hospital tenga momentos de ocio, cultura, ilusión y acompañamiento también pueden ser parte del tratamiento. «No debemos olvidar que los niños siempre lo son y el juego, estar con amigos y aprender cosas nuevas no deben faltar nunca en sus vidas», concluye.