Desde sus inicios en Zaragoza en 1932, DKV ha evolucionado hasta consolidarse como uno de los actores principales del sector sanitario privado en España

Lo que comenzó como un Igualatorio Médico-Quirúrgico y de Especialidades fue ampliando su alcance con el paso de las décadas hasta su integración en 1998 en el grupo alemán Munich Re a través de ERGO, tras la adquisición de la histórica compañía aragonesa Previasa. Este hito marcó el inicio de una etapa de expansión, modernización y crecimiento, convirtiendo a DKV en una aseguradora especializada en salud con una clara vocación transformadora.

Actualmente, DKV cuenta con casi dos millones de asegurados y ha superado los 950 millones de euros en primas anuales, con un beneficio neto que supera los 46 millones de euros. La compañía ofrece una de las redes médicas más amplias del país, con acceso a más de 51.000 profesionales y 1.000 centros concertados, incluyendo varios de los hospitales privados mejor valorados del territorio nacional.

En este sentido, DKV ofrece una gama de pólizas adaptadas a las diferentes necesidades de los asegurados, desde seguros médicos con acceso al cuadro médico concertado hasta modalidades de reembolso y seguros internacionales.

Entre sus productos más destacados se encuentran los seguros sin copago, ideales para quienes buscan cobertura completa sin costes adicionales por acto médico, así como pólizas con copago ajustado para quienes priorizan una prima más asequible. Igualmente, todas las opciones incluyen servicios como consultas presenciales y digitales, pruebas diagnósticas, hospitalización, fisioterapia, atención psicológica, preparación al parto y revisiones pediátricas y ginecológicas, además de cobertura dental básica sin coste añadido. A esto se suman servicios complementarios como el acceso a programas de prevención y bienestar, asistencia médica en viajes al extranjero, la posibilidad de incluir medicina alternativa y, en muchos casos, una atención médica digitalizada.

Importancia de la transformación digital para DKV

Por ende, la transformación digital ocupa un lugar central en la estrategia de la compañía. La aplicación «Quiero cuidarme más», con cerca de un millón de descargas, permite a los usuarios acceder a videoconsultas, recetas electrónicas, planes personalizados de salud, seguimiento del embarazo o fisioterapia digital. Este ecosistema se complementa con el servicio «DKV Personal Doctor», que ofrece un modelo de atención médica continuada, con un profesional disponible de forma digital para acompañar a cada persona cuando lo necesite.

Junto a la innovación, DKV mantiene un fuerte compromiso con la sostenibilidad. La aseguradora es neutra en carbono desde 2007 y en 2025 sigue avanzando para convertirse en empresa responsable con el medioambiente. Toda su energía proviene de fuentes renovables, y su impacto medioambiental es auditado de forma externa y transparente. Asimismo, a través de la Fundación Integralia DKV, la entidad impulsa la integración laboral de personas con discapacidad, con más de 600 empleos directos creados y 5.000 personas beneficiadas desde su creación.

En paralelo, DKV lidera iniciativas de salud pública, voluntariado corporativo y colaboración con agentes sociales y del ámbito sanitario. También forma parte de redes internacionales como EIT Health y ha desarrollado plataformas como CIMA, que mejoran la conectividad entre mediadores y aseguradoras. La compañía está alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 y mantiene una estrategia de responsabilidad social transversal en todas sus áreas de actividad.

Por ello, con más de 90 años de experiencia, DKV continúa posicionándose como un referente en salud privada, combinando cercanía, tecnología y responsabilidad. Su compromiso va más allá de la póliza: acompaña a las personas en todas las etapas de su vida, cuidando no solo de su salud, sino también del entorno que las rodea.